“Libertador es una mala película histórica”

El historiador Daniel Terán Solano opinó sobre la verosimilitud de la película de Alberto Arvelo

Daniel Terán Solano, historiador y profesor de la Universidad Central de Venzuela

Daniel Terán Solano, historiador y profesor de la Universidad Central de Venzuela

 “Pensaba que tendríamos la película definitiva, porque siendo Bolívar nuestro personaje fundamental se merecía tener un filme glorioso”, mencionó el historiador

   Con motivo del estreno en Venezuela  de la película Libertador, dirigida por Alberto Arvelo, y protagonizada por Edgar Ramírez; el historiador y profesor de la Universidad Central de Venezuela, Daniel Terán Solano, opinó sobre el aspecto histórico de la película que se basa en la vida del prócer venezolano Simón Bolívar.

– Antes de ver la película “Libertador”, dirigida por Alberto Arvelo, ¿Cuáles eran sus expectativas?  ¿Se cumplieron algunas?

– Al ser una película con mucho presupuesto y realizada bajo ciertos estándares de Hollywood, con muchos recursos técnicos, audiovisuales y estéticos,  yo esperaba que la película relanzaría a Bolívar y “lo Venezolano” al mundo en general. Pensaba que tendríamos la película definitiva, porque siendo Bolívar nuestro personaje fundamental se merecía tener un filme glorioso. Mis expectativas no se cumplieron.

– ¿Qué hechos rescata de la película que informen al público de lo que sucedió en realidad en la historia?

Que muestra que hay un proceso. En la vida de cualquier personaje, como en la existencia de cualquier país, nación y cultura, se debe entender que hay una temporalidad. Hay un proceso en el cual tú puedes una evolución. Y por supuesto, muestran que la guerra de independencia fue una lucha cruenta, que implicó la participación de muchas personas, que hubo decisiones… Y me refiero al intercambio de ideas, debates, intrigas, conspiraciones. El problema es, que aunque muestra eso, hace una distorsión de lo que ya se conoce y se sabe de Bolívar, al menos en el campo académico. En los filmes históricos el guion está atrapado por una realidad. Como ficción pueden plantearse muchas cosas, en historia no. Hay una serie de limitantes que no pueden violentarse, y en la película se toman muchas licencias que violentan la realidad histórica.

–¿Cuál de esas licencias fue la que más le incomodó?

El final, porque plantean abiertamente que a Bolívar lo asesinaron.  La película plantea que él está muy sano y difunden el rumor de que tiene tuberculosis, por lo tanto preparan algo en su contra. Eso no fue así. Bolívar ya estaba enfermo cuando tenía 45 años, hay una carta donde él escribe a un compañero suyo: “Si pudiese verlo a usted en este momento, me vería muy mal. Tengo 45 pero parezco de 60 años”.

Uno está acostumbrado a ver a los héroes de la patria como superhéroes, pero eran personas que tenían necesidades y defectos, por lo que podían verse afectados por una serie de circunstancias. En 1830 Bolívar había recibido muchos golpes anímicos muy duros, como la muerte de Antonio José de Sucre, y alejarse de Manuelita Sáenz. Un hombre como Bolívar tuvo que sentirse afectado y tuvo que haberse visto mal. Eso no lo muestra la película. Ahí vemos un Bolívar fuerte, resistente. Me molestó como historiador y hasta como ciudadano  venezolano… porque están distorsionando un bien, que no es propiamente material, pero es muy importante y se debe valorar, que es la historia.

– ¿Cuál es su opinión respecto a por qué le dieron ese final? ¿Por qué hacer una conspiración para la muerte de Bolívar?

Sobre eso diré una opinión muy personal, muy subjetiva y discutible. Creo que ahí se aplica lo que dice un refrán: “el que pone los reales pone las condiciones”. Esta película recibió financiamiento del estado, una parte. Es obvio que Venezuela, desde los últimos 15 años, con el gobierno del presidente Chávez, y ahora el presidente Maduro, ha tenido una visión o interpretación particular sobre quién fue Simón Bolívar, qué fue lo que hizo y cómo falleció. Recordemos que en el 2010 el presidente decidió, que se exhumaran los restos del Libertador, porque él estaba convencido de que lo habían asesinado…  Al final se demostró que murió de causas naturales, y en sus huesos tenía los efectos de la tuberculosis.

La idea de que a Bolívar lo mataran es mucho mejor que una muerte por tuberculosis, y eso también entra dentro de lo que podemos llamar la mítica. Un héroe tiene que morir a caballo, peleando, de pie, pistola en mano, ensangrentado,  con la bandera, ¿Qué es eso de morir en tu casa, con tus nietos, o morir tranquilo en tu cama? La muerte física se asume, cuando es por enfermedad como una derrota. En cambio, cuando es una muerte física por asesinato se asume que es heroica porque tú estabas luchando contra lo que te terminó venciendo y eso habla mejor de ti. Para los que son amantes de lo épico decir que lo hayan matado es glorioso.

–Si estuviera en sus manos elegir los hechos históricos que cuenten el por qué Bolívar fue El Libertador, para una película de dos horas, ¿Cuáles serían?

Creo que se hizo bien el haber obviado gran parte de la infancia de Bolívar. Pero la película debió haber tomado en cuenta  el 19 de abril de 1810 y el 5 de julio de 1811. Debió haber tomado en cuenta la participación de Bolívar en la Sociedad Patriótica. Pienso que debieron haber hablado de algunos documentos fundamentales, como el Manifiesto de Cartagena, el discurso de Angostura… mencionan algo de la carta de Jamaica, pero no mencionan la presencia o el apoyo de los Ingleses en Venezuela; muestran unos británicos, pero no se ve la preocupación que tuvo Bolívar, porque él quería una alianza con Inglaterra. Me parece terrible que no hayan nombrado la guerra a muerte, la presencia de Boves. Hay personajes históricos que fueron obviados, como Morillo o Petión; los fueron evitando porque tal vez el tiempo no alcanzaba, pero creo fundamental que se hubiesen mencionado. Apenas muestran rápidamente la campaña de Perú. No se habla del Congreso de Panamá, y no se explica cómo se disuelve la Gran Colombia.

–Usted mencionó que para Bolívar era importante una alianza con los británicos, pero en la película estaba rechazando su ayuda…

Bueno, esas cuestiones corresponden al criterio del escritor o guionista, que creó un personaje británico que conoce a Bolívar y le induce la idea de la lucha independentista, le propone luego abrir un banco en Colombia y Bolívar lo rechaza. Eso no tiene ni pie ni cabeza. Los ingleses apoyaron la independencia aquí en América Latina, porque ellos querían ganancias económicas. Bolívar estuvo a punto de llegar a acuerdos importantes con los ingleses, de hecho, no se tiende a nombrar mucho en el caso de la historia pero está perfectamente probado y documentado que Bolívar, en su desesperación cuando cae la Segunda República, llegó a plantearle a los ingleses que invadieran Venezuela.

–En un artículo que usted escribió sobre esta película, y que está publicado en su blog… Usted explica que Bolívar no fue exiliado a la “selva de Cartagena”, como muestra la película, sino que se le dio un pasaporte a la Ciudad de Cartagena… Entonces, ¿Cuál cree usted que pudiera ser el motivo por el que cambiaran algo así? Y los indígenas o nativos  que él reclutó en esa selva… ¿cómo se explicaría según los registros, según la historia?

Lo que me sorprende es que hablan de algo que no existe. En Cartagena no hay selvas, en todo caso hay ciénagas. Plantean una mentira terrible. Bolívar se va a la ciudad de Cartagena y ahí trata de convencer a los neogranadinos, los colombianos, que lo ayuden… es cuando hace el famoso manifiesto de Cartagena. ¿Qué busca la película mostrar? Que bolívar siendo un blanco mantuano, de pronto se ve en una situación muy difícil y abandona sus prejuicios de clase. Si Bolívar algo mantuvo en su vida, fue cierta clase elegante, porque él llevaba sus cubiertos, tenía un mayordomo que lo acompañaba. Era muy cuidadoso con su cabello, con su imagen, con sus dientes y sus uñas; él no quería presentarse ante la gente feo. Las descripciones que hay de Bolívar siempre decían que su apariencia era impecable. En el filme no, ellos ponen al Libertador como un guerrillero.

–En una entrevista al Director Alberto Arvelo, realizada por Correo del Orinoco, él mencionó una frase, la cuál es, cito: “Los grandes héroes de la historia hablaban como hombres, no como libros”. Entonces, considerando lo que se ha dicho sobre si el film se apega o no fielmente a la historia, ¿Qué opina usted de esta frase?

Alberto Arvelo en este caso tiene que defender la decisión que tomó… y evidentemente, al plantear eso quiere decir que, cuando un héroe hablaba como un hombre está suponiendo que hay una lógica universal en la condición humana, que quiere decir que posiblemente ante una determinada circunstancia iba a reaccionar como ser humano. Intenta plantear que los libros plantean otra cosa, distorsionan los sucesos y posiblemente no fueron así. Sin embargo hay que recordarle al Director Arvelo que es gracias a lo que está en los libros que se va construyendo la imagen que uno tiene de los personajes. No podemos divorciarnos de los libros.

–Según sus conocimientos sobre Bolívar y la imagen que dio Arvelo en la película, ¿está correcta la personalidad del personaje, la forma en la que él actuaba?

–En parte sí. Porque hay un Bolívar que fue como lo describe Edgar Ramírez, como actor lo hizo muy bien. Pero el Libertador, como todo ser humano, tuvo etapas. No fue así en todo momento. Hay una etapa que yo llamo “la etapa radical” de Bolívar que corresponde a cuando él era joven, él era lo que llamaríamos hoy en día “un come candela”, un tipo radical. Pero esa etapa cambia a una más centrada desde que cae la Segunda República; él está dispuesto a negociar. La última etapa que es desde el año 26 hasta su muerte es la conservadora; él está muy desencantado de la vida, desconfía de muchas cosas, etc. Esos tres bolívares son personajes que hay que tomar en cuenta al hacer una película…porque no toda su vida fue un hombre radical, come candela. Es una contradicción muy grave que hizo el director, porque él hablaba del hombre, pero los hombres también cambian.

–Puede que muchos den por ciertos los hechos que presenta la película. Ocurre que muchos prefieren ver una película que leer un libro, entonces… Con fines académicos, siendo usted profesor e historiador, ¿recomendaría esta película?

–No, no la recomiendo. Porque es una mala película histórica. La mayoría de los hechos no se apegan a la realidad. Como una película de ficción si podría recomendarla, pero como historiador, no.

Cabrera Navid

Un pensamiento en ““Libertador es una mala película histórica”

  1. hola yo no sabia nada de Simón Bolivar vi la película y me intereso su vida pero o que decepción no va con su vida que triste que engañen a la gente asi, a soy Mexicana

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